Somos Campeones de Europa de fútbol. Otra vez. TRICAMPEONES.
3ª Eurocopa y ganadores consecutivamente de Eurocopa 2008 de Austria y Suiza - Mundial 2010 de Sudáfrica - Eurocopa 2012 Polonia y Ucrania.
Supongo que como la mayoría de españoles, me alegro
profundamente y más aún como otros aficionados al deporte del fútbol de ganar
de la forma con la que lo hizo el equipo de la selección a través del juego
desplegado.
A nivel deportivo
está claro que somos probablemente una de las potencias mundiales si no la
primera. Y no sólo en fútbol:
Ahí están los Rafael Nada, los Pau y Marc Gasol, los
Fernando Alonso, los Alberto Contador, las selecciones de baloncesto y
balonmano, y todos los que me olvido.
Me gustaría saber qué piensa un ciudadano de a pie respecto
a esto, yo vuelvo a suponer que estará muy orgulloso de pertenecer al mismo país
que esos deportistas de élite, y que sentirá la victoria de ellos como si fuera
la suya misma. Y por ello salió a la calle a celebrarlo con la roja puesta.
Hasta ahí, me parece todo perfecto, estoy de acuerdo y
comparto la mayoría de sentimientos, sin perjuicio de que rechazo actitudes y
sentimientos incoherentes para la razón humana que pudieron salir anoche a la
luz como el odio a otros países, el racismo (¿cuántos insultos escuchaste ayer
hacia Balotelli?), destrozos en las calles, atropellos, y sobre todo, la falta
de conciencia de la realidad.
Sin perjuicio también de lo que pasa hoy en el mismo país que celebrara ayer por todo lo alto el éxito.
Ayer éramos un país unido por el deporte, hoy DEBEMOS seguir siéndolo, unidos además por
otros ámbitos.
Unas preguntas al respecto que podrían medir el nivel de
satisfacción y orgullo hacia el país en otros ámbitos distintos al
estrictamente deportivo.
¿Sabes cuál es la tasa de desempleo?
¿Sabes cómo aumenta el nivel de pobreza y desciende el nivel
educativo?
¿Sabes cómo gestionan nuestro país los supuestos
representantes de los ciudadanos?
¿Sabes lo que pasó ayer en Valencia?
¿Sabemos qué supone para nuestro país la famosa prima de
riesgo?
¿Sabemos qué nivel de deuda tenemos?
Como todas éstas preguntas y sus respuestas no son naturalmente
motivos de celebración, debemos de participar activamente en la mejora de
nuestro país a través de la conciencia,
de evitar la corrupción, de no
provocar los problemas, de colaboración con los demás, de ayuda a nuestros semejantes, de luchar por lo que verdaderamente
queremos, de no hacer daño a los demás,
de tener humanidad, y de poseer la
capacidad de la bondad.
Con todas esas y otras características, algún día podremos
celebrar, aunque no sea de forma desenfrenada la mejora de la situación general
del país, podemos ser campeones en otras cosas, y debemos luchar por ello, o al
menos no ser perdedores.
Enhorabuena a la selección, enhorabuena a todos por animar, pero no puede todo quedarse aquí.
A pesar de que hemos
hecho historia en el deporte, y nos hemos convertido en leyenda, NO ES
SUFICIENTE.
-Artículos relacionados: La Roja, Contrariedad.
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