Somos estables pero flexibles



 
Esta mañana he terminado un post que me ha llevado más de una hora completarlo y con las prisas, le he dado a no guardar, se me ha borrado y mi Word no tenía la opción de autorecuperar activada.



Cuando empezamos esta “aventura”, este “trabajo” que es el blog del mercado de la incertidumbre nadie dijo que iba a ser fácil, y no lo digo por el hecho de que se me borre una entrada y haya perdido una hora de mi vida, lo digo porque supone un esfuerzo, pero que sorprendiéndome a mí mismo, trae sus frutos.



Lo mismo ocurre cuando buscas trabajo, cuando llevas un tiempo dedicado a unos estudios determinados y se te van haciendo largos, o cuando has emprendido y ves que a tu empresa le surgen más problemas de la cuenta, o cuando te ves estancado una vez que llevas trabajando unos meses o años en una misma empresa privada.



Las personas somos por naturaleza “interiormente flexibles”, y parece contradictorio porque como sabemos, mucha gente busca la estabilidad en todo lo que hace, trabajo, familia, amigos, etc. Pero seguro que además, todos queremos que nuestros días sean diferentes, e inherentemente buscamos cosas nuevas en nuestra vida cada día (pon aquí el ejemplo que se te venga ahora a la cabeza). Hay gente que asimila estabilidad con monotonía. Algunos se equivocan, no tiene porqué ser así. Los conceptos de estabilidad y flexibilidad son en este caso compatibles.



Imagínate unas zapatillas de correr, somos como ellas, estables pero flexibles.




Todo esto es para mostrarte la siguiente idea:



Existe la persona que toma una decisión, y cree que con ella está todo el trabajo hecho. Sin embrago luego, obtiene frustración por una razón o por otra.



En cambio, el que pensó que su decisión podría ser flexible y que debería estar alerta y preparado para cualquier agente externo que pudiera intervenir de forma que provoque cambios, acertó. Acertó porque es consciente de que todo eso supone un gran esfuerzo, esfuerzo que luego reportará beneficios sin duda.



Lo importante de tomar una decisión no es tomarla, sino darle forma una vez que la has tomado, estar preparado para sus consecuencias y ser consciente de que pueden ser buenas o malas, y en éste último caso, moldear nuestro comportamiento a las situaciones.



Tanto como para mantener un blog actualizado permanente mente en el tiempo, tanto para luchar delante de los apuntes, tanto para el que emprende y va solucionando problemas, como tanto para el que hace que su vida en  la empresa privada no le provoque insatisfacción.



Y todo ello, si es con una actitud positiva y una sonrisa en la boca, mucho mejor.




Ánimo, y Buen Fin de Semana !!!





Escribo una entrada cada día de la semana (o al menos eso intento), te invito a que te pases por el mercado de la incertidumbre siempre que te apetezca, para leer y debatir si quieres cualquier cosa, sugerir cambios,  mejoras, o dejar algún comentario.


Si prefieres ponerte en contacto conmigo directamente, estoy en twitter como @juanjocesc


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