Si yo fuera técnico, reclutador, director o seleccionador de RRHH y tuviera que realizar procesos de selección comenzaría
las entrevistas de trabajo con un abrazo.
¿ Y tú?
Dando las gracias al candidato por ofrecerse a ayudar a la
empresa. Por ofrecer su compromiso y dedicación a mi empresa sin
conocerme de nada.
Si yo fuera reclutador, ofrecería a la persona candidata las
mayores facilidades para que se encontrara cómoda para afrontar todas las
preguntas que yo le vaya a formular y para que nuestra interactuación fuera de
la manera más cordial, sencilla y amena. Intentando crear un ambiente cálido e ideal para una entrevista de trabajo. Enfocada en la búsqueda de factores y
matices que consiguieran unir las posturas y necesidades tanto de uno como de
otro. Si fuera en el sentido contrario, pienso que estaría perdiendo el tiempo.
No buscar eliminarlo pronto del proceso dependiendo de su
respuesta, sino para realmente ver si soy capaz de ofrecerle ese trabajo que él
o ella desea, porque entonces sabré exactamente que si soy capaz de
ofrecérselo, habré contratado a la persona idónea y nos irá bien tanto a uno
como a otro.
Luego realizaría preguntas sobre su intención en el proyecto
de su vida, y cómo el trabajo que yo le ofrezco puede influir en ella, no
personales, sino generales, cómo desea que fuera su tiempo, cómo le gustaría
compaginarlo y su idea de forma de trabajar. Le preguntaría directamente :
¿Cómo te gustaría que fuera tu trabajo?
Evitaría todo tipo de comentario que presionara al
candidato, puesto que considero que si tuviera algún tipo de cosa que ocultar
me daría cuenta enseguida, así que le facilitaré la tarea que ha
venido a hacer, presentar sus credenciales y defender su candidatura de la mejor forma
posible, y en el tiempo adecuado que consideremos los dos.
Ya luego como profesional que debería ser, valoraría los
pros y los contras de la entrevista, y la criba sería respecto a una
planificación hecha con antelación que me permitiera definir bien qué estoy
buscando.
Una cosa más, si finalmente el candidato no me convenciera,
lo llamaría o antes de empezar indicaría que si no lo llamamos en por ejemplo
una semana significaría que no ha entrado en el proceso final o no ha sido
candidato porque no entiendo cómo las empresas no llaman para decirte que no.
Y tú, cómo serías ¿? O
si eres ya un reclutador profesional…cómo eres? Por cada comentario que dejes
aquí, menos incertidumbre habrá en nuestro Mercado. Gracias !!! @juanjocesc
Por mi experiencia en Visteon cuando he entrevistado a estudiantes para acceder a una plaza de becario, u otras personas para acceder a un puesto de operario y/o técnico intentaba ser próximo a esa persona. Si hacia falta hasta le invitaba a un café de esos de vending o a una botellita de agua.
ResponderEliminarQuizás sea mi forma de ser, pero conseguia que la entrevista fuera una conversación sin tensión, con sinceridad y fluida.
Ahora me toca estar al otro lado de la mesa, soy el entrevistado, y prefiero que sean de esta forma a otras más tradicionales.
Muchas Gracias por compartir tu experiencia con nosotros y por mostrar que existe realmente ese técnico en RRHH que describe el artículo.
ResponderEliminarSiendo mucho que estes de nuevo en la parte del entrevistado, esperemos que pronto vuelvas al otro lado de la mesa.
Consideremos que ésta época es una transición hacia algo mejor, y que todos nos replanteemos incluidos los jefes que las formas tradicionalistas tanto de contratar como de ejecutar el trabajo deben ser acordes a los cambios para evolucionar.