Estabas harto de patearte tu pueblo y de hacer viajes a las
ciudades de tu alrededor, incluso a otras más alejadas suponiendo un coste
pesado para tu economía con el objetivo de dejar el curriculum en papel en todo
tipo de empresas. Entonces comenzaste a buscar trabajo por Internet, porque
te habían dicho eso de que "en Internet está todo", o al menos que hay multitud de
posibilidades, de ofertas de trabajo que no verías en periódicos o en la calle,
y que existen cantidad de portales de empleo donde puedes estar al día de cada
una de ellas, en el ámbito que te interese, y en cualquier ciudad, provincia o
Comunidad Autónoma.
Posiblemente estés conectado desde un soporte bastante diferente ahora... |
Te dijiste a ti mismo. ¿Por qué no? y decidiste ponerte manos a la obra. Estabas
concienciado. E ibas a dedicarle un número considerable de horas a la búsqueda
de empleo por la Web. Te lo
tomaste como un trabajo más. Que no estaba remunerado, pero estabas con ganas, y
bastante motivado.
Cuando te adentraste en la maraña del ciberespacio viste que no
era tan fácil como te decían o como creías antes. Te pareció incluso más fácil y
cómodo darte un paseo por el solecito con una carpeta llena de curriculums, dejándolo
en las empresas y hablando con sus gerentes o trabajadores, ya que Internet no
era tan simple. Los portales de demandas y ofertas de empleo en Internet eran
infinitos, todos y cada uno te pedía que te registraras. Era un mundo nuevo para
ti lleno de usuarios, y contraseñas.
Qué mareo, y qué pereza.
Como eras nuevo en esto, te estuvo costando muchísimo trabajo,
pero ¿quién dijo que iba a ser fácil? Internet te ofrecía la posibilidad de
acceder a muchísima información, pero al ser tan amplio, y tener tanto
contenido, debías establecer prioridades.
Los primeros pequeños consejos que te debieron dar si lo único
que te interesaba al principio era en exclusiva la búsqueda de trabajo serían
posiblemente parecidos a éstos:
1. Crea una cuenta de correo electrónico. Para que toda la
información que te interese pueda llegar a tu correo y puedas gestionarla de
forma ordenada. Es igual que un buzón de correos, pero en tu ordenador.
2. Regístrate y completa tu curriculum en cada uno de los
portales de búsqueda de empleo de Internet que conozcas. Si ves que no tienes
demasiado tiempo, hazlo en varias veces, no pasa nada. Te habían hablado de unos
señores, un tal “Infojobs”, un tal “Infoempleo”, un tal “Laboris”, y un tal “Trabajar.com”, y decidiste ir a conocerlos.
3. Abre un Documento Word en tu ordenador, y escribe los
usuarios y contraseñas que utilices en cada uno de ellos. Parece una tontería
pero no es así, te servirá para tener un control de cada uno de ellos y para
recordarlas una vez que estés registrado en un número grande de portales, con usuarios
y contraseñas diferentes. No es demasiado aconsejable siempre tener los mismos
datos de acceso, ni unos demasiado simples. Por seguridad.
Al tiempo, observaste que la gente no sólo buscaba trabajo, sino
que también interactúaban entre ellos, dejaban comentarios, opiniones personales, y
te díste cuenta que Internet era un mundo en sí, y que no paraba de crecer, y que con un poco de esfuerzo y concentración, te ofrecería multitud de posibilidades, luego, un día, leíste
nuevas palabras como “blog” o “redes sociales” que te llamaron enormemente la
atención.
Entonces, te picó la curiosidad de saber algo más sobre ese
nuevo mundillo y seguir descubriendo…
Escribo una entrada
cada día de la semana (o al menos eso intento), te invito a que te pases por el
mercado de la incertidumbre siempre que te apetezca, para leer y debatir si
quieres cualquier cosa, sugerir cambios, mejoras, o dejar algún comentario.
Si prefieres ponerte
en contacto conmigo directamente, estoy en twitter como @juanjocesc
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por cada comentario que dejes aquí, menos incertidumbre habrá en nuestro "Mercado". Gracias! Juanjo.